La luna al morir bajo el mar, se llevo mis sueños,
El cielo quedo oscuro ante mis ojos,
Ya no hay estrellas fugaces de deseos,
Ni luceros que vigilen mis sueños,
Todo quedo entre penumbras,
Donde me pierdo en su silencio,
Una palabra asoma a mis labios,
Que como una daga me corta por dentro,
Me hiere la piel, me cala los huesos,
Noche oscura sin luna,
Maldita noche de silencio,
Muda y rota me lleva,
Donde se pudren mis huesos,
Donde arrastro mis cadenas,
Donde mi soledad es mi tormento...
Noche ingrata sin luna,
Noche llena de misterio,
Llevame contigo lejos,
Donde no tenga recuerdos,
Donde encuentre la paz...
Que un día se llevo sus besos...
Ana Castellano,
hoy han vuelto...por todos los senderos de la noche han venido a llorar en tu lecho mientras bebes su llanto como un pañuelo negro...y te duelen como llagas...te duelen como muertos.
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